Ventajas de usar una jaula para gato para el traslado de tu mascota
Antes de trasladar a un gato hay que tener en cuenta que ellos son animales de rutina, es decir, que se sienten cómodos haciendo las mismas actividades diariamente con libertad de movimiento y seguridad sobre su entorno. Por lo tanto, los viajes les generan ansiedad y estrés, ya que los sacan de su zona de confort.
Para que los gatos no sufran consecuencias negativas antes, durante o después de un viaje, la regla esencial es que vayan dentro de una jaula para gato. Esta herramienta es perfecta para brindarles seguridad y comodidad, proporcionándoles una sensación de refugio frente a los estímulos exteriores.
Tipos de jaula: blandas y rígidas
Las jaulas blandas se recomiendan para viajes cortos y siempre se deben posar sobre una superficie plana, de modo que el gato no deba hacer esfuerzo con su cuerpo para mantenerla en equilibrio.
Las rígidas, por su parte, son las reglamentarias para viajes en avión y también se recomiendan para viajes largos, porque pueden incluir bebederos, comederos o rejillas de piso para recoger las heces y orina sin que el gato entre en contacto con ellas.
¿Por qué debo usar una jaula para gato?
Para mayor comodidad, una jaula especial permite el traslado seguro del gato en cualquier tipo de vehículo o a pie, sin mayores inconvenientes, debido a sus características plegables y tamaño compacto. Así, estará protegido de golpes, choques o caídas, además no podrá exponerse a situaciones de riesgo provocadas por su ansiedad, como rasguños, huidas o peleas con otros animales.
Una jaula para gato puede brindar un espacio de bienestar para el animal, ya que después de un corto período de adaptación podrá sentirse seguro para comer, beber agua, dormir y relajarse. En condiciones de frío o calor durante un traslado, la jaula puede equiparse con mantas o frío para mantener la temperatura.
Todo dueño de un gato necesita tener una jaula para poder llevar a su mascota segura consigo a donde quiera que vaya.
